Intentando hacer un mapa mental de la península ibérica, encontramos dos tipos de influencias para el viñedo, la influencia Oceánica y la Continental. La Oceánica nos traerá humedad y la continental será un poco más seca y cálida. Encontraremos también diferentes alturas por las múltiples cordilleras y serranías que existen, las cuales nos generarán vientos muy benéficos para la uva, además que la altura sobre el nivel del mar nos ayudará a generar buena acidez en los vinos que sabemos que es esencial.
Si hablamos del mar, al norte tendremos el mar Cantábrico, hacia el oeste el océano Atlántico, y hacia el sur este el mar Mediterráneo. Cada uno de ellos con característica de temperatura salinidad e influencia sobre el continente muy diferente. De las 131 Denominaciones de calidad que hay en España tenemos 70 DO, 61 IGP (dentro de las cuales tenemos 14 Vinos de Pago, 6 Vinos de calidad y 41 Vino de la tierra). Todas ellas con una muy diferente influencia del continente o mar para dar vinos diferenciales en cada Denominación.
Hagamos un recorrido por las diferentes zonas. Todo el norte de España está regido por el mar Cantábrico, el cual establece una temperatura fresca y humedad a todos los viñedos que están en su influencia como son la DO Txacoli en el país Vasco, o la influencia fresca que da a DO Navarra. A los viñedos cercanos al mar la influencia puede sentirse inclusive por notas minerales sutiles emanadas del suelo que algún día fue fondo marino. Esta gran influencia Cantábrica se ve disminuida por la gran Cordillera del mismo nombre, que culmina con los imponentes picos de Europa, que evita que el viento frío pase a las regiones más continentales como son DOCa Rioja, DO Ribera del Duero, DO Cigales, etc… que todas tienen influencia Continental con algunos componentes particulares dependiendo la zona.
Si nos acercamos al océano Atlántico por el oeste encontraremos grandes zonas como DO Rías Baixas con sus famosos albariños, todos ellos con gran influencia del mar y del suelo que es granítico, haciendo los vinos minerales con un gusto en boca especial y perfectos para hacer sinergia con platos basados en mariscos, al ser una zona fría de influencia marítima no tendremos muchos vinos tintos hasta que no subamos algunos metros sobre el nivel del mar, encontrando zonas como DO Ribeiro, DO Valdeorras o DO Bierzo que aunque tienen la influencia fresca del Atlántico, tienen la altura suficiente para estar balanceadas por el clima caliente continental, por eso los vinos son más tintos estructurados de gran estructura.
La zona media de España es una gran meseta que tiene influencia completamente continental y la diferenciación la hace el suelo, el varietal o uva y por supuesto la altura. Aquí no hay influencia marítima, por ello los vinos de la zona centro son frutales con aromas de evolución y pocas notas minerales, algunas zonas son DO Madrid, Do Mentrida, DO Mancha, inclusive incluyendo a las zonas más cercanas al este como son DO Jumilla, DO Yecla en la zona Valenciana.
Otra gran influencia es la del mar Mediterránea que nos da vientos frescos de humedad para los vinos de DO Penedés, DOCa Priorato, DO Cava, Inclusive DO Málaga y sierras de Málaga, todas ellas con influencia también de los vientos calientes que se desprenden del Norte del Sahara, con sus particulares influencias.
Finalmente tenemos la zona sur de España con influencia del mar Atlántico como es DO Jerez, DO Huelva que los frescos vientos del Atlántico hacen que sean equilibrados con notas minerales basados en los vientos y los suelos de origen marino.
Con ello tenemos que el gran mosaico de vinos en España están basados en las influencias de los diferentes mares que dan un particular gusto y percepción a los vinos de la península.
Recuerden siempre que la mineralidad del mar está en relación directa con los alimentos que de él se extraigan, siempre el norte es más salado con gran contenido de fitoplancton de lo que se alimentan los peces, de contenido graso elevado por la necesidad de cubrir el frío, mientras que las zonas cálidas son menos salinas (dependiendo la zonas y el movimiento de corrientes), los mariscos y peces que ahí viven serán menos sápidos en grasa y de proteína diferente. Por ello los vinos de zonas frescas y minerales van perfecto con los mariscos de la misma zona, ligando por la mineralidad y haciéndolos inolvidables.
Un abrazo
Jesús